Ruta por el sur del Reino Unido: Stonehenge y Salisbury

06 Oct Ruta por el sur del Reino Unido: Stonehenge y Salisbury

Ese día teníamos planeado ir a Stonehenge y por la tarde iríamos Salisbury, así que después de recoger a la hermana de Sergio en su casa emprendimos el viaje desde Bristol hacia Stonehenge.La hora que dura el viaje se nos hizo muy corto y cuando quisimos darnos cuenta ya estábamos en el parking de Stonehenge.

No se si alguno ya ha visitado este monumento antes, pero desde finales del verano pasado ya no se puede llegar con el coche hasta allí directamente si no que han construido unos edificios nuevos en la zona baja de la colina y allí es donde se tiene que dejar el coche.

Compramos las entradas (20€ en 2018) y nos pusimos a la cola ya que para para subir han puesto un coche todoterreno con unos carros acomodados como un pequeño vagón, varios de estos forman un trencillo. Estos coches van y vienen colina abajo para llevarte hasta el monumento. Otra opción es ir andando si se desea, pero nosotros fuimos un poco vagos y fuimos en el trenecito.

Sergio y su hermana habían estado, pero para mi era la primera vez y no se si es las ganas que tenia de verlo o que, pero me impresiono bastante a primera vista y las piedras interiores son realmente altas!!

Hay muchas hipótesis sobre como pusieron las piedras allí y sobre todo, el porque, pero la verdad es que realmente no se sabe a ciencia cierta ni que es, ni como lo llevaron hasta allí  ni por supuesto como fueron capaces de mover las piedras de entre 2 y 35 toneladas traídas Pembrokeshirede – que se encuentra a 300 kilómetros del Stonehenge –  con los medios de hace 5000 años.

Las piedras se disponen en una formación concentrica, el circulo interior esta compuesto por cinco trilitos de una altura de casi 5 metros y la piedra del altar, todo esto esta rodeado por trilitos (de unos 3 metros) unidos formando un circulo mas grande. En la actualizad solo 3 de los trilitos interiores se encuentran en pie y muy pocos exteriores. No cuesta imaginarse como de impresionante tenia que ser en la epoca en la que fue construido – Siglo XX a. C.

Disfrutamos un largo rato del monumento con sesión de fotos haciendo el chorra incluida, y cuando llego la hora de comer nos fuimos a esperar el cochecito que nos llevase de vuelta a la entrada.

En  los edificios de la entrada además de la taquilla y un bar ( bastante caro por cierto) hay una exposición sobre el monumento con explicación de cómo era antiguamente y algunas de las teorías del transporte de las piedras. La entrada a este pabellón entra con la entrada al monumento.

Cuando nosotros fuimos aun estaban construyendo una replica de las casas de la época neolítica y una reproducción a tamaño real que explica una de las teorías de cómo pudieron mover las piedras de ese tamaño hasta allí.

Finalizada la visita cogimos el coche y emprendimos el viaje hasta  Salisbury que esta bastante cerca –a unos 15 Kilómetros –  para disfrutar de la parte medieval del pueblo pero sobre todo de su inmensa catedral.

Salisbury es una pequeña ciudad que conserva gran parte de su patrimonio medieval, paseamos por sus calles y disfrutamos de muchos edificios que aun se conservan y que te trasladan a otra época. Pero sin duda, lo más impresionante es entrar en la plaza de la catedral y quedarte sin palabras al observar la altura de la torre. La catedral se termino en el año 1320, imaginaros lo que tuvo que  ser en aquella época para que a día de hoy – 8 siglos después – siga siendo la torre más alta de Inglaterra (129 metros).

La catedral se encuentra en una explanada de césped y aislada de edificios lo que hace más imponente su tamaño, os recomendamos tumbaros en el césped, si el tiempo lo permite, y disfrutar de los detalles de su fachada.

Su interior no nos defraudo, tiene muchos detalles de ornamentación pero lo que más llama la atención son las enormes vidrieras con vivos colores, si el día es luminoso la luz en el interior es fantástica. Otra cosa que nos llamo mucho la atención fue la enorme pila bautismal, y encontrarnos con la antigua veleta que coronaba la torre y comprobar su enorme tamaño.

De vuelta a Bristol, nos caía de camino Bath, así que decidimos dar una vuelta rápida aunque ya había anochecido.

Disfrutamos de los exteriores de la Abadía y de sus calles colindantes. Pero entre el frío y la leve iluminación de la ciudad decidimos irnos porque no veíamos un pimiento.

Si tu tienes la oportunidad de disfrutar de la ciudad por el día te recomendamos hacer un tour gratis para saber mas de esta ciudad llena de termas.

Y así se acabo nuestra Ruta de ese día, al día siguiente nos esperaba Oxford pero eso os lo contamos en otra entrada ;).

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